1. ¿Qué alcance tiene el sacramento?
El sacramento del matrimonio representa una unión sagrada e indisoluble entre los cónyuges, que perdura hasta la muerte de uno de ellos. Este vínculo, instaurado por Dios, es la base de la familia y su propósito principal es la procreación y crianza de los hijos.
2. ¿Una ceremonia con misa o sin misa?
Las parejas suelen preguntarse si deben celebrar su matrimonio con o sin misa. Esta decisión depende de las preferencias de los novios, del sacerdote y de otras circunstancias. El matrimonio, como uno de los siete sacramentos, puede celebrarse con o sin la Eucaristía. Si se prefiere una ceremonia más breve o por cualquier otra razón, es posible optar por una boda sin misa.
3. ¿Es necesario estar bautizados?
El bautismo es esencial para incorporarse a la Iglesia Católica. Según el derecho canónico, al menos uno de los contrayentes debe estar bautizado o haber sido recibido formalmente en la Iglesia. Por ello, es necesario presentar el certificado de bautismo. Si solo uno está bautizado, se aplican las normativas del canon 1124 para matrimonios mixtos o del canon 1086 para disparidad de cultos.
4. ¿Y sobre la comunión?
La Primera Comunión no es un requisito para casarse. Si ninguno de los contrayentes ha tomado la comunión, pueden optar por una ceremonia sin misa. Si solo uno ha tomado la comunión, pueden elegir entre una ceremonia con o sin misa, aunque la persona que no ha comulgado no podrá recibir la Eucaristía. Tampoco es necesario haber recibido la confirmación.
5. ¿Cuál es el objetivo del cursillo prematrimonial?
La Iglesia solicita a los futuros esposos participar en un cursillo prematrimonial, que profundiza en el significado del sacramento y los desafíos de la vida matrimonial. Durante el cursillo, se reflexiona sobre la convivencia, los derechos y obligaciones, los hijos y las propiedades esenciales del matrimonio. Este curso puede realizarse en la parroquia donde se celebrará la boda o en otra dentro de la misma diócesis.
6. ¿Padrinos o testigos?
A diferencia de los padrinos, cuya presencia es una costumbre social, los testigos son exigidos por la Iglesia. El derecho canónico no requiere padrinos para la celebración del matrimonio, sino testigos que den fe de la unión. El sacerdote convocará a los testigos para asegurarse de que no haya vicios en el consentimiento.
7. Requisitos y documentación
Para formalizar la inscripción matrimonial, se requerirán los siguientes documentos de cada contrayente:
- Documento de identidad (de los contrayentes y los testigos)
- Partida de nacimiento
- Acta de bautismo (obtenida en la iglesia donde fueron bautizados, con una antigüedad no mayor a seis meses)
- Certificado del curso prematrimonial
- Inscripción del matrimonio civil
Es recomendable acudir a la parroquia de la zona de residencia de al menos uno de los miembros de la pareja.
8. Expediente matrimonial
El expediente matrimonial se abre tres meses antes de la fecha elegida para la boda. A medida que se obtengan los documentos, estos se irán incorporando al expediente. Se necesitan dos testigos que no sean parientes para dar fe de la relación de pareja. Los novios tendrán una entrevista con el sacerdote y firmarán su testimonio. Según las circunstancias, podrán ser necesarias algunas reuniones adicionales para preparar la ceremonia.
9. Impedimentos y licencias
Si uno de los contrayentes no es católico, se habla de matrimonio mixto. En el caso de disparidad de cultos (uno bautizado y otro no), se requiere una dispensa parroquial para validar el matrimonio católico. La Iglesia busca garantizar la fe católica de los hijos y evitar divisiones familiares, considerando cada caso con especial atención.
10. ¿Se pueden casar en otro lugar?
La naturaleza sacramental del matrimonio sugiere que la ceremonia se realice en la iglesia parroquial. Sin embargo, es posible obtener permiso del párroco o del obispo para celebrar el matrimonio en otro lugar por causas justas y razonables. Estas dispensas son específicas y están reguladas por el derecho canónico. Para contrayentes bautizados católicos, las probabilidades de celebrar fuera de la iglesia son bajas, aunque no imposibles, dependiendo de la disposición del clero.
El matrimonio religioso formaliza el compromiso mutuo de los contrayentes. Durante el cursillo prematrimonial, podrán profundizar en el significado del sacramento y resolver cualquier duda adicional.